¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
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¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Resumen de la ponencia presentada en Ávila en el Congreso Satélite del XV Congreso Mundial de Psiquiatría: “Espiritualidad, Cultura y Salud Mental”, el 19 de septiembre de 2014.
Autora: Maribel Rodriguez. Psiquiatra. Psicoterapeuta. Profesora en la Universidad de la Mística (Ávila).
En todos los caminos espirituales, ligados a tradiciones antiguas, la meditación se enseña solo a personas con un compromiso espiritual y que cumplen ciertos requisitos (como, por ejemplo, tener un adecuado comportamiento ético en su vida cotidiana). No se enseña a la ligera a cualquiera e incluso se pide al discípulo atravesar algunas pruebas, para comprobar si está preparado para el camino que va a iniciar.
En la actualidad, las técnicas más utilizadas en contextos científicos derivan de un tipo de meditación budista que se llama Vipassana, que ha recibido el nombre de Mindfulness, y que en castellano se ha traducido como “atención plena”. El Mindfulness es el “método” con el que se han desarrollado más trabajos de investigación.
Estos trabajos de investigación nos muestran los efectos beneficiosos del Mindfulness en numerosos trabajos psiquiátrico, como los trastornos de ansiedad, la depresión, el TOC, en algunos trastornos de personalidad, en la hiperactividad, en trastornos de la conducta alimentaria, en el insomnio, el estrés, etc.
Cuando, además, la meditación va ligada a un camino espiritual, como es el caso del Budismo, el Dalai Lama nos cuenta que el meditar produce más empatía, más compasión, más consciencia y el desarrollo de la capacidad de amar incondicionalmente.
Por otro lado, nos encontramos con pocos datos, en publicaciones científicas, sobre los posibles riesgos y contraindicaciones de estas técnicas, cuando hay numerosos testimonios acerca de dificultades psicológicas sufridas en retiros de meditación y complicaciones más graves, como cuadros psicóticos o incluso suicidios. Además, ya nos han advertido acerca de posibles peligros los maestros de las diferentes tradiciones espirituales. Por estos motivos, intentaremos recopilar datos sobre los posibles “efectos adversos” que pueden estar asociados a la práctica meditativa.
“EFECTOS ADVERSOS” ASOCIADOS A LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN.
1. Efectos psicológicos negativos.
Consistirían en reacciones psicológicas que producen malestar en el individuo, en sus relaciones interpersonales, o en la forma de afrontar los problemas cotidianos, pero no necesariamente desencadenan alteraciones psicopatológicas.
Angustia, idealización del maestro, desconexión de las emociones, obsesividad, aislamiento, ensimismamiento, confusión, desorientación, afloramiento de recuerdos negativos, intensificación del estrés, tristeza, fantasías, regresión, ignorar emociones negativas, evasión espiritual.
2. Alteraciones psicopatológicas.
La exacerbación de trastornos mentales o la aparición de alteraciones psicopatógicas en personas que están realizando una práctica intensiva de meditación podría deberse a dos motivos: por una parte, a una mayor autoconsciencia por la práctica de la autoobservación (más en la meditación tipo Mindfulness) y, por otra, a una reducción de las barreras mentales mediante la relajación que produce la meditación. Ambos motivos podría favorecer la emergencia de problemas latentes en el sujeto.
Ansiedad, crisis de pánico, alucinaciones, delirios, psicosis, depresión, disociación, despersonalización, desrealización, narcisismo, suicidio, emergencia de memorias traumáticas y desencadenamiento de estrés agudo.
Hay que señalar explícitamente que hablamos de “problemas latentes” y no de problemas que la meditación genere, aparentemente, por sí misma.
Las personas con una estructura de personalidad más frágil pueden ser más susceptibles a sufrir diversas complicaciones como producto de la práctica meditativa. Hay que tener un yo estructurado antes de buscar el vacío, la disolución del yo, etc.
3. Efectos espirituales “negativos”.
En todas las tradiciones se habla de los problemas que pueden surgir en el camino espiritual o más específicamente en la práctica de la meditación. Estos “efectos espirituales negativos” nos señalan bien momentos difíciles, bien situaciones que provocan o movilizan emociones negativas en relación con la práctica espiritual, pero que pueden ser parte de un proceso en sí positivo, por lo que entrecomillamos la palabra “negativos”.
“Noche oscura”, conciencia del mal que hay dentro de nosotros, vanidad espiritual, visiones, crisis de fe, “adicción al trance”, “muerte” o desprendimiento del ego, sensación de vacío, “glotonería espiritual”.
Contraindicaciones en la práctica de la meditación.
- Antecedentes de cuadros psicóticos.
- Vulnerabilidad a la psicosis.
- Personalidad esquizotípica.
- Personalidad esquizoide.
- Trastornos disociativos.
- Trastornos somatoformes (hipocondríasis y somatización).
Otros temas a tener en cuenta.
La meditación se está aplicando en un contexto de psicoterapia que es occidental, cuando la meditación tipo Mindfulness surge en una cultura oriental con una finalidad distinta a la de un tratamiento de psicoterapia. La meditación oriental tiene como finalidad principal el alcanzar la iluminación y no el alivio de problemas psicológicos.
CONCLUSIONES.
- En algunas personas, la práctica de la meditación puede tener riesgos para la salud mental, que parecen tener factores predisponentes que les hacen más vulnerables ante dicha práctica.
- Es importante que quien enseña meditación tenga suficientes conocimientos acerca de lo que está haciendo, experiencia y madurez, en relación con la práctica meditativa y la práctica psicoterapéutica: Por lo que conviene que se prescriba de forma cuidadosa y sea adecuadamente supervisada.
- Quien la practica (y obviamente quien la enseña) es importante que tenga un yo mínimamente estructurado. En algunos casos podría ser preciso un trabajo previo de maduración psicológica, que puede facilitarse mediante tratamiento psicoterapéutico.
https://zenyadvaita.blogspot.com/2019/1 ... ectos.html
Autora: Maribel Rodriguez. Psiquiatra. Psicoterapeuta. Profesora en la Universidad de la Mística (Ávila).
En todos los caminos espirituales, ligados a tradiciones antiguas, la meditación se enseña solo a personas con un compromiso espiritual y que cumplen ciertos requisitos (como, por ejemplo, tener un adecuado comportamiento ético en su vida cotidiana). No se enseña a la ligera a cualquiera e incluso se pide al discípulo atravesar algunas pruebas, para comprobar si está preparado para el camino que va a iniciar.
En la actualidad, las técnicas más utilizadas en contextos científicos derivan de un tipo de meditación budista que se llama Vipassana, que ha recibido el nombre de Mindfulness, y que en castellano se ha traducido como “atención plena”. El Mindfulness es el “método” con el que se han desarrollado más trabajos de investigación.
Estos trabajos de investigación nos muestran los efectos beneficiosos del Mindfulness en numerosos trabajos psiquiátrico, como los trastornos de ansiedad, la depresión, el TOC, en algunos trastornos de personalidad, en la hiperactividad, en trastornos de la conducta alimentaria, en el insomnio, el estrés, etc.
Cuando, además, la meditación va ligada a un camino espiritual, como es el caso del Budismo, el Dalai Lama nos cuenta que el meditar produce más empatía, más compasión, más consciencia y el desarrollo de la capacidad de amar incondicionalmente.
Por otro lado, nos encontramos con pocos datos, en publicaciones científicas, sobre los posibles riesgos y contraindicaciones de estas técnicas, cuando hay numerosos testimonios acerca de dificultades psicológicas sufridas en retiros de meditación y complicaciones más graves, como cuadros psicóticos o incluso suicidios. Además, ya nos han advertido acerca de posibles peligros los maestros de las diferentes tradiciones espirituales. Por estos motivos, intentaremos recopilar datos sobre los posibles “efectos adversos” que pueden estar asociados a la práctica meditativa.
“EFECTOS ADVERSOS” ASOCIADOS A LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN.
1. Efectos psicológicos negativos.
Consistirían en reacciones psicológicas que producen malestar en el individuo, en sus relaciones interpersonales, o en la forma de afrontar los problemas cotidianos, pero no necesariamente desencadenan alteraciones psicopatológicas.
Angustia, idealización del maestro, desconexión de las emociones, obsesividad, aislamiento, ensimismamiento, confusión, desorientación, afloramiento de recuerdos negativos, intensificación del estrés, tristeza, fantasías, regresión, ignorar emociones negativas, evasión espiritual.
2. Alteraciones psicopatológicas.
La exacerbación de trastornos mentales o la aparición de alteraciones psicopatógicas en personas que están realizando una práctica intensiva de meditación podría deberse a dos motivos: por una parte, a una mayor autoconsciencia por la práctica de la autoobservación (más en la meditación tipo Mindfulness) y, por otra, a una reducción de las barreras mentales mediante la relajación que produce la meditación. Ambos motivos podría favorecer la emergencia de problemas latentes en el sujeto.
Ansiedad, crisis de pánico, alucinaciones, delirios, psicosis, depresión, disociación, despersonalización, desrealización, narcisismo, suicidio, emergencia de memorias traumáticas y desencadenamiento de estrés agudo.
Hay que señalar explícitamente que hablamos de “problemas latentes” y no de problemas que la meditación genere, aparentemente, por sí misma.
Las personas con una estructura de personalidad más frágil pueden ser más susceptibles a sufrir diversas complicaciones como producto de la práctica meditativa. Hay que tener un yo estructurado antes de buscar el vacío, la disolución del yo, etc.
3. Efectos espirituales “negativos”.
En todas las tradiciones se habla de los problemas que pueden surgir en el camino espiritual o más específicamente en la práctica de la meditación. Estos “efectos espirituales negativos” nos señalan bien momentos difíciles, bien situaciones que provocan o movilizan emociones negativas en relación con la práctica espiritual, pero que pueden ser parte de un proceso en sí positivo, por lo que entrecomillamos la palabra “negativos”.
“Noche oscura”, conciencia del mal que hay dentro de nosotros, vanidad espiritual, visiones, crisis de fe, “adicción al trance”, “muerte” o desprendimiento del ego, sensación de vacío, “glotonería espiritual”.
Contraindicaciones en la práctica de la meditación.
- Antecedentes de cuadros psicóticos.
- Vulnerabilidad a la psicosis.
- Personalidad esquizotípica.
- Personalidad esquizoide.
- Trastornos disociativos.
- Trastornos somatoformes (hipocondríasis y somatización).
Otros temas a tener en cuenta.
La meditación se está aplicando en un contexto de psicoterapia que es occidental, cuando la meditación tipo Mindfulness surge en una cultura oriental con una finalidad distinta a la de un tratamiento de psicoterapia. La meditación oriental tiene como finalidad principal el alcanzar la iluminación y no el alivio de problemas psicológicos.
CONCLUSIONES.
- En algunas personas, la práctica de la meditación puede tener riesgos para la salud mental, que parecen tener factores predisponentes que les hacen más vulnerables ante dicha práctica.
- Es importante que quien enseña meditación tenga suficientes conocimientos acerca de lo que está haciendo, experiencia y madurez, en relación con la práctica meditativa y la práctica psicoterapéutica: Por lo que conviene que se prescriba de forma cuidadosa y sea adecuadamente supervisada.
- Quien la practica (y obviamente quien la enseña) es importante que tenga un yo mínimamente estructurado. En algunos casos podría ser preciso un trabajo previo de maduración psicológica, que puede facilitarse mediante tratamiento psicoterapéutico.
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Interesante. Creo que efectivamente, los maestros se exponen a mucho, porque no siempre saben con quién tratan. Conocí un caso que es para considerarse. No nombraré el nombre de su maestro/a.
Hubo una persona con la que coincidía de manera regular en un centro zen, e hicimos amistad. Era joven, de unos 30 años, y tenía un gran interés por la práctica del Zen. Practicaba a diario, y no parecía tener problemas mentales. Pero en cierto momento me pareció distinguir en el ciertos bloqueos. Quería tener la iluminación. Quizás llegó a obsesionarse con ella. De pronto su vida empezó a tomar un rumbo complicado. Tomó decisiones algo precipitadas. Creo que aceleró, cuando debió disminuir el ritmo. Su maestro/a no detectó estos cambios y entraron en una mala relación. Al final le acusó de haberle guiado mal. Un día se tiró al metro.
He oído hablar de otros casos similares pero no los conocí personalmente. La práctica espiritual es peligrosa, sí. Así y todo, yo aposté por ella y no me arrepiento. Sé que no tenía otra opción. Hoy, sigo vivo. Miro para atrás y veo los peligros por los que pasé. Ha sido como caminar por campos minados. He tenido suerte. Hoy no me veo en esas situaciones. Ya he entrado en la recta final de mi vida y me veo guiado desde adentro. Suerte a los que comienzan.
Hubo una persona con la que coincidía de manera regular en un centro zen, e hicimos amistad. Era joven, de unos 30 años, y tenía un gran interés por la práctica del Zen. Practicaba a diario, y no parecía tener problemas mentales. Pero en cierto momento me pareció distinguir en el ciertos bloqueos. Quería tener la iluminación. Quizás llegó a obsesionarse con ella. De pronto su vida empezó a tomar un rumbo complicado. Tomó decisiones algo precipitadas. Creo que aceleró, cuando debió disminuir el ritmo. Su maestro/a no detectó estos cambios y entraron en una mala relación. Al final le acusó de haberle guiado mal. Un día se tiró al metro.
He oído hablar de otros casos similares pero no los conocí personalmente. La práctica espiritual es peligrosa, sí. Así y todo, yo aposté por ella y no me arrepiento. Sé que no tenía otra opción. Hoy, sigo vivo. Miro para atrás y veo los peligros por los que pasé. Ha sido como caminar por campos minados. He tenido suerte. Hoy no me veo en esas situaciones. Ya he entrado en la recta final de mi vida y me veo guiado desde adentro. Suerte a los que comienzan.
- Carl Sagan
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Cualquier actividad humana puede tener efectos adversos. La mayoría o todos los efectos adversos que se relatan en el mensaje de inicio pueden presentarse en la práctica católica en cuya órbita parece encontrarse esta psiquiatra. Por ejemplo y deteniéndome sólo en el primer punto relativo a los 'efectos psicológicos negativos':
Angustia, obsesión, confusión, estrés, tristeza-->> Enfermedad de los escrúpulos. Pánico al castigo divino y al infierno, prácticas mortificantes, etc.
Idealización del maestro-->> Voto de obediencia al superior, infabilidad papal, machismo eclesial, etc.
Aislamiento, ensimismamiento, evasión-->> Llamamiento al retiro del mundo, órdenes de vida 'contemplativa' que permanecen encerrados de por vida, votos de silencio, etc.
Fantasías-->> delirios relativos a seres imaginarios que se comunican con el sujeto (dios, virgen, ángeles, santos, etc).
Angustia, obsesión, confusión, estrés, tristeza-->> Enfermedad de los escrúpulos. Pánico al castigo divino y al infierno, prácticas mortificantes, etc.
Idealización del maestro-->> Voto de obediencia al superior, infabilidad papal, machismo eclesial, etc.
Aislamiento, ensimismamiento, evasión-->> Llamamiento al retiro del mundo, órdenes de vida 'contemplativa' que permanecen encerrados de por vida, votos de silencio, etc.
Fantasías-->> delirios relativos a seres imaginarios que se comunican con el sujeto (dios, virgen, ángeles, santos, etc).
Última edición por Carl Sagan el 17 Jun 2024 11:32, editado 1 vez en total.
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- Carl Sagan
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Algunas ideas que se deslizan en el vídeo las puedo compartir:
- Que se utilice la meditación como remedio para ciertas patologías mentales, porque ésa no es su finalidad original.
- Que la pongan en práctica personas que padezcan esas mismas patologías, al menos sin control médico.
- Que se la desligue de un contexto más amplio donde podría adquirir plena eficacia, en el caso del budismo, el noble óctuple sendero.
Por lo demás me interesa dejar en el hilo una recopilación de enlaces que glosan los beneficios de la meditación.
- Que se utilice la meditación como remedio para ciertas patologías mentales, porque ésa no es su finalidad original.
- Que la pongan en práctica personas que padezcan esas mismas patologías, al menos sin control médico.
- Que se la desligue de un contexto más amplio donde podría adquirir plena eficacia, en el caso del budismo, el noble óctuple sendero.
Por lo demás me interesa dejar en el hilo una recopilación de enlaces que glosan los beneficios de la meditación.
Última edición por Carl Sagan el 17 Jun 2024 11:40, editado 1 vez en total.
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Creo que en realidad la práctica de la meditación previa al despertar es bastante inocua así en general, tanto sus beneficios como sus perjuicios son muy relativos, salvo en casos muy concretos de enfermedades mentales que además saltarían muy pronto a la vista de que la práctica sería perjudicial.
La meditación como tal creo que solo comienza realmente cuando la mente se autodescubre a sí misma en su esencia natural. A partir de ese momento, la meditación deja de ser algo forzado para pasar a ser algo gozoso que de manera natural [la mente] busca continuamente porque cada vez más desea hundirse (samadhi) en el reencuentro de su propia esencia natural.
Esa meditación gozosa sí es meditación como tal y nunca daña porque a nada afecta perjudicialmente que no estuviera previamente en la mente en otro plano (Alaya) En todo caso siempre será beneficioso el samadhi porque va mejorando el propio rendimiento de la mente para hacerse cargo de las citadas cicatrices de Alaya que hubiese, por ejemplo.
La meditación forzada previa al despertar es interesante porque aumenta los niveles de autoconciencia pero no es tan necesaria al principio en términos de estar demasiado tiempo practicando. Mejor desarrollar Prajna y Sila. La meditación puede resultar creo que muy tediosa si se está mucho tiempo en ello .. Desde luego, forzar sería una clamorosa bandera roja de que por ahí no es, pero no porque sea peligroso o dañino sino porque a efectos de la práctica hay un momento que es fútil estar más tiempo en ello.
Un abrazo
La meditación como tal creo que solo comienza realmente cuando la mente se autodescubre a sí misma en su esencia natural. A partir de ese momento, la meditación deja de ser algo forzado para pasar a ser algo gozoso que de manera natural [la mente] busca continuamente porque cada vez más desea hundirse (samadhi) en el reencuentro de su propia esencia natural.
Esa meditación gozosa sí es meditación como tal y nunca daña porque a nada afecta perjudicialmente que no estuviera previamente en la mente en otro plano (Alaya) En todo caso siempre será beneficioso el samadhi porque va mejorando el propio rendimiento de la mente para hacerse cargo de las citadas cicatrices de Alaya que hubiese, por ejemplo.
La meditación forzada previa al despertar es interesante porque aumenta los niveles de autoconciencia pero no es tan necesaria al principio en términos de estar demasiado tiempo practicando. Mejor desarrollar Prajna y Sila. La meditación puede resultar creo que muy tediosa si se está mucho tiempo en ello .. Desde luego, forzar sería una clamorosa bandera roja de que por ahí no es, pero no porque sea peligroso o dañino sino porque a efectos de la práctica hay un momento que es fútil estar más tiempo en ello.
Un abrazo
- tao.te.kat
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Mi impresión es que la meditación no puede hacerte enfermar psicológicamente en absoluto, pero un enfermo mental probablemente no debería meditar a menos que lo recomiende su médico y bajo supervisión estrecha.
Luego no sería exacto decir que la meditación tiene efectos adversos.
Pero sí que las personas con desequilibrios deben tener cuidado, con esto y con otras muchas cuestiones (las redes sociales, por ejemplo). No porque les vaya a ir mal si meditasen correctamente pero para ellos es fácil desviarse por veredas como las que comenta Daido y acabar con obsesiones que alienta en la meditación.
Dicho esto, todos sabemos que hay muchas formas de problemas mentales. Cada uno es un mundo, se debe ser prudente. Y además el maestro budista no es un psicólogo ni tiene por qué serlo, la persona debe estar asesorada correctamente por un profesional.
Luego no sería exacto decir que la meditación tiene efectos adversos.
Pero sí que las personas con desequilibrios deben tener cuidado, con esto y con otras muchas cuestiones (las redes sociales, por ejemplo). No porque les vaya a ir mal si meditasen correctamente pero para ellos es fácil desviarse por veredas como las que comenta Daido y acabar con obsesiones que alienta en la meditación.
Dicho esto, todos sabemos que hay muchas formas de problemas mentales. Cada uno es un mundo, se debe ser prudente. Y además el maestro budista no es un psicólogo ni tiene por qué serlo, la persona debe estar asesorada correctamente por un profesional.
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Sobre estos temas siempre opino que la meditación en sí está bastante sobredimensionada en cuanto a los efectos que producen (sea adversos o beneficiosos).
En general creo que es más beneficioso que otra cosa porque permite "parar" en este ajetreo diario de pleno siglo XXI y le da una oportunidad a la mente para que se generen condiciones más óptimas de autoindagación.
Quizá la principal característica de estos tiempos que vivimos es la enorme cantidad de estímulos perceptivos que recibe un cerebro, el cual de manera natural no está preparado para semejante bombardeo.
Como la mayoría de personas no vivimos 24/7 en un monasterio budista, tendremos que adaptar la práctica meditativa y no meditativa a los tiempos que vivimos.
Y en este sentido una consideración: en referencia a las cicatrices de Ayala (en forma de enfermedades, trastornos, etc) las meditaciones apenas afectan a lo que ya existe en la mente de manera innata. Lo más que puede hacer es ayudar a exponer eso que existe inconscientemente a la consciencia. Lo cual es beneficioso, no un efecto adverso.
Incluso en el caso que la mente se vaya realizando espiritualmente no afecta en demasía a las cicatrices previas, tan solo que aumentan los recursos disponobles para atender emocionalmente esas cicatrices (lo cual está muy bien).
Y por cierto, determinados trastornos mentales o enfermedades mentales como dice Tao, es territorio de especialistas o de la propia referencia intuitiva de cada cual, peo en ningún caso de maestros. Creo que un maestro acompaña en la sutiliddad en el camino hacia las optimiziacaciones mentales o no, y sin embargo, una ventaja de no vivir en un monasterio y por tanto de vivir en el apogeo diario de pleno siglo XXI es que hay una enorme cantidad de recursos para comprender vipassanicamente todo ese caudal inconsciente de Alaya que vaya saliendo a la luz.
Abrazo!
En general creo que es más beneficioso que otra cosa porque permite "parar" en este ajetreo diario de pleno siglo XXI y le da una oportunidad a la mente para que se generen condiciones más óptimas de autoindagación.
Quizá la principal característica de estos tiempos que vivimos es la enorme cantidad de estímulos perceptivos que recibe un cerebro, el cual de manera natural no está preparado para semejante bombardeo.
Como la mayoría de personas no vivimos 24/7 en un monasterio budista, tendremos que adaptar la práctica meditativa y no meditativa a los tiempos que vivimos.
Y en este sentido una consideración: en referencia a las cicatrices de Ayala (en forma de enfermedades, trastornos, etc) las meditaciones apenas afectan a lo que ya existe en la mente de manera innata. Lo más que puede hacer es ayudar a exponer eso que existe inconscientemente a la consciencia. Lo cual es beneficioso, no un efecto adverso.
Incluso en el caso que la mente se vaya realizando espiritualmente no afecta en demasía a las cicatrices previas, tan solo que aumentan los recursos disponobles para atender emocionalmente esas cicatrices (lo cual está muy bien).
Y por cierto, determinados trastornos mentales o enfermedades mentales como dice Tao, es territorio de especialistas o de la propia referencia intuitiva de cada cual, peo en ningún caso de maestros. Creo que un maestro acompaña en la sutiliddad en el camino hacia las optimiziacaciones mentales o no, y sin embargo, una ventaja de no vivir en un monasterio y por tanto de vivir en el apogeo diario de pleno siglo XXI es que hay una enorme cantidad de recursos para comprender vipassanicamente todo ese caudal inconsciente de Alaya que vaya saliendo a la luz.
Abrazo!
Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
Lo que se llama hoy meditación puede ser muchas cosas. Algo como el mindfullness, lo puede practicar casi todo el mundo. Pero tampoco va a producir efectos milagrosos. Puede ser una especie de higiene mental, que no está mal. Ahora bien, de lo que aquí en estos foros hablamos, no es de eso. Aqui no solemos referirnos a un ejercicio de higiene mental, sino que hablamos de una práctica de meditación budista: zazen, vipassana, o tantra. Esto ya requiere de un guía. No un psicólogo, sino un maestro. Estas prácticas eran para monjes en el pasado, pero hoy casi todos los que practican son laicos. Laicos, eso sí, muy comprometidos. En eso, todo ha cambiado mucho.
Si una persona practica un método, sea el que sea, si hace más de media hora al día, va a necesitar la ayuda de alguien que le guíe. A veces, son cosas sutiles, que no parecen importantes, pero que lo son. También es preciso integrar la práctica de la meditación dentro de un entorno religioso, o sea, tomar los preceptos y cosas a sí. Cuando se practica fuera de un marco religioso, es cuando los métodos de meditación se vuelven peligrosos. Es frecuente practicar para librarse del sufrimiento. Mucha gente se acerca al budismo para eso, y las cosas no son así de sencillas. Reguiere práctica y requiere paciencia. Y casi siempre requiere una sangha, cosas que no siempre está al alcance.
Personalmente, no me parece que sea para mí necesario en este momento, pero lo ha sido. Llega un momento en que el maestro interior toma las riendas. Afortunadamente para mí, el maestro interior ha estado siempre atento a mis necesidades. Yo siempre he practicado solo, y llegó un momento en que hasta decidí hacer vida de ermitaño. Fue una etapa importante, pero quedó atrás. Pero el maestro interior está siempre aquí ahora. No para mí, sino para todos. Aunque no siempre nos damos cuenta de él. En general no nos damos cuenta. Si en cierto momento nos damos cuenta, con eso basta. Luego, aunque no nos demos cuenta, sabemos que está.
Saludos
Si una persona practica un método, sea el que sea, si hace más de media hora al día, va a necesitar la ayuda de alguien que le guíe. A veces, son cosas sutiles, que no parecen importantes, pero que lo son. También es preciso integrar la práctica de la meditación dentro de un entorno religioso, o sea, tomar los preceptos y cosas a sí. Cuando se practica fuera de un marco religioso, es cuando los métodos de meditación se vuelven peligrosos. Es frecuente practicar para librarse del sufrimiento. Mucha gente se acerca al budismo para eso, y las cosas no son así de sencillas. Reguiere práctica y requiere paciencia. Y casi siempre requiere una sangha, cosas que no siempre está al alcance.
Personalmente, no me parece que sea para mí necesario en este momento, pero lo ha sido. Llega un momento en que el maestro interior toma las riendas. Afortunadamente para mí, el maestro interior ha estado siempre atento a mis necesidades. Yo siempre he practicado solo, y llegó un momento en que hasta decidí hacer vida de ermitaño. Fue una etapa importante, pero quedó atrás. Pero el maestro interior está siempre aquí ahora. No para mí, sino para todos. Aunque no siempre nos damos cuenta de él. En general no nos damos cuenta. Si en cierto momento nos damos cuenta, con eso basta. Luego, aunque no nos demos cuenta, sabemos que está.
Saludos
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Re: ¿Puede producir la meditación efectos adversos? Maribel Rodriguez. Psiquiatra.
PREVENCIÓN DE LESIONES EN LA PRÁCTICA DE LA MEDITACIÓN.
Me faltaba no mucho para cumplir los sesenta cuando me fue apareciendo un dolor en las rodillas. Al cabo de unos meses ya no me podía poner en cuclillas y cuando flexionaba las piernas también me dolía. Práctico meditación zen desde hace muchos años. Mi sentada diaria la solía hacer en la postura de seiza, sentado de rodillas en una banqueta. En los retiros intensivos a los que asistía lo hacía alternando la postura de seiza con la birmana. Mi dolor en las rodillas me imposibilitó para meditar en la postura de seiza. Acudí al médico a consultarle mi problema, aunque no le conté que era meditador, y, sin necesidad de solicitar una radiografía, me diagnosticó artrosis en las rodillas, “propia de la edad”, según dijo. Como ya no podía meditar sentado de rodillas tuve que empezar a hacerlo en una silla. Y al cabo de unos meses sucedió que el dolor de rodillas fue disminuyendo hasta desaparecer. En la actualidad, con sesenta y siete años me puedo poner en cuclillas sin ningún problema.
Cuando asistimos a un curso de introducción a la meditación, sea de meditación zen, vipassana, mindfulness, yoga,… nadie nos advierte de los posibles riesgos de lesiones que pueden aparecer por practicar en determinadas posturas. Y deberían hacerlo. No solo hablar de los efectos beneficiosos.
En algunas escuelas de meditación más estrictas se considera la postura del loto como la más adecuada, y por ello se anima a los estudiantes, aunque al principio les resulte dolorosa, a esforzarse en practicar en esta postura. Pero la rodilla es una articulación de bisagra, lo que quiere decir que solamente es capaz de flexionarse y extenderse. Las lesiones llegan cuando le pedimos que realice un movimiento para el que no fue diseñada: rotar.
Hay algunas personas muy flexibles que pueden sentarse en el loto o el medio loto sin apenas dificultad, pero eso no significa que puedan hacer varios retiros intensivos al año, con un montón de sentadas al día de 30 o 40 minutos de duración, durante años y que no surjan lesiones importantes y acaben en el quirófano. Cualquier traumatólogo, médico rehabilitador o fisioterapeuta puede confirmar esto. Y es que en posturas como el loto, cuando no tenemos la suficiente movilidad en la cadera, comenzamos a exigirle a la rodilla que asista en la rotación, efectuando un efecto de torsión. El daño ocasionado, aunque al principio no se note, es acumulativo, y con el paso de los años puede ocasionar graves lesiones de rodilla.Y es que no se debe compensar con la rodilla lo que la cadera no puede hacer. El problema reside en que hay meditadores que obligan repetidamente a su cuerpo a adoptar ciertas posturas, cuando su propia fisiología lo impide. Muchos meditadores confunden el dolor de las articulaciones -que significa que se debe dejar de hacer determinada postura- con la rigidez, a la cual se deben sobreponer y superar.
Hace unos días me propuse encontrar la silla más adecuada para la meditación. Ya había probado las ergonómicas, pero en ellas se carga mucho el peso sobre las rodillas y no me acabaron de convencer. Después de visitar muchas páginas web de sillas y de acudir a varias tiendas para probarlas, la que más me convenció fue una silla de El Corte Inglés a la que, curiosamente, le han denominado con el nombre de silla zen. Es un poco cara, 129€. Ya he meditado sentado en ella y es perfecta, la que andaba buscando. Ah, por si alguien piensa mal, El Corte Inglés no me paga por recomendar su silla, ni me da comisión por las que se vendan.
https://zenyadvaita.blogspot.com/2022/1 ... ctica.html
Me faltaba no mucho para cumplir los sesenta cuando me fue apareciendo un dolor en las rodillas. Al cabo de unos meses ya no me podía poner en cuclillas y cuando flexionaba las piernas también me dolía. Práctico meditación zen desde hace muchos años. Mi sentada diaria la solía hacer en la postura de seiza, sentado de rodillas en una banqueta. En los retiros intensivos a los que asistía lo hacía alternando la postura de seiza con la birmana. Mi dolor en las rodillas me imposibilitó para meditar en la postura de seiza. Acudí al médico a consultarle mi problema, aunque no le conté que era meditador, y, sin necesidad de solicitar una radiografía, me diagnosticó artrosis en las rodillas, “propia de la edad”, según dijo. Como ya no podía meditar sentado de rodillas tuve que empezar a hacerlo en una silla. Y al cabo de unos meses sucedió que el dolor de rodillas fue disminuyendo hasta desaparecer. En la actualidad, con sesenta y siete años me puedo poner en cuclillas sin ningún problema.
Cuando asistimos a un curso de introducción a la meditación, sea de meditación zen, vipassana, mindfulness, yoga,… nadie nos advierte de los posibles riesgos de lesiones que pueden aparecer por practicar en determinadas posturas. Y deberían hacerlo. No solo hablar de los efectos beneficiosos.
En algunas escuelas de meditación más estrictas se considera la postura del loto como la más adecuada, y por ello se anima a los estudiantes, aunque al principio les resulte dolorosa, a esforzarse en practicar en esta postura. Pero la rodilla es una articulación de bisagra, lo que quiere decir que solamente es capaz de flexionarse y extenderse. Las lesiones llegan cuando le pedimos que realice un movimiento para el que no fue diseñada: rotar.
Hay algunas personas muy flexibles que pueden sentarse en el loto o el medio loto sin apenas dificultad, pero eso no significa que puedan hacer varios retiros intensivos al año, con un montón de sentadas al día de 30 o 40 minutos de duración, durante años y que no surjan lesiones importantes y acaben en el quirófano. Cualquier traumatólogo, médico rehabilitador o fisioterapeuta puede confirmar esto. Y es que en posturas como el loto, cuando no tenemos la suficiente movilidad en la cadera, comenzamos a exigirle a la rodilla que asista en la rotación, efectuando un efecto de torsión. El daño ocasionado, aunque al principio no se note, es acumulativo, y con el paso de los años puede ocasionar graves lesiones de rodilla.Y es que no se debe compensar con la rodilla lo que la cadera no puede hacer. El problema reside en que hay meditadores que obligan repetidamente a su cuerpo a adoptar ciertas posturas, cuando su propia fisiología lo impide. Muchos meditadores confunden el dolor de las articulaciones -que significa que se debe dejar de hacer determinada postura- con la rigidez, a la cual se deben sobreponer y superar.
Hace unos días me propuse encontrar la silla más adecuada para la meditación. Ya había probado las ergonómicas, pero en ellas se carga mucho el peso sobre las rodillas y no me acabaron de convencer. Después de visitar muchas páginas web de sillas y de acudir a varias tiendas para probarlas, la que más me convenció fue una silla de El Corte Inglés a la que, curiosamente, le han denominado con el nombre de silla zen. Es un poco cara, 129€. Ya he meditado sentado en ella y es perfecta, la que andaba buscando. Ah, por si alguien piensa mal, El Corte Inglés no me paga por recomendar su silla, ni me da comisión por las que se vendan.
https://zenyadvaita.blogspot.com/2022/1 ... ctica.html