LoboGris escribió: ↑11 May 2021 01:26
no existe un “yo”.
Ya habrás visto en otros hilos que a algunos esa forma de expresar
anatta nos parece algo imprecisa
Pero ya hay otros hilos para hablar de ello.
Respecto al tema que planteas te dejo una respuesta del Venerable U Silananda.
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Estudiante: Usted mencionó hace unas semanas que en el buddhismo no hay alma eterna. Pero se habla acerca de la reencarnación, ¿cómo se explica eso?
Venerable U Silananda: Veremos esto cuando estudiemos los procesos cognitivos en la clase 9, pero les explicaré ahora un poco. Aceptamos la existencia momentánea; por lo tanto, cada cosa aparece y desaparece en cada momento. Aun en esta vida, un momento es diferente de otro momento. Vivimos solamente por un momento y luego morimos y luego hay el próximo momento y el siguiente y así. El buddhismo no acepta un alma permanente, algo que permanece para siempre, que va de una vida a otra, tal vez purificándose a sí misma o algo así. Sin embargo, el buddhismo acepta el renacimiento o pueden llamarlo reencarnación. El individuo que ha renacido en la siguiente vida no es idéntico al individuo que murió aquí. Sin embargo, no está completamente desconectado de quien murió aquí. Éste es un punto difícil. Tenemos una fórmula que dice: "ni él, ni otro". El que renació allí no es la misma persona que murió aquí. Sin embargo, el que renació allí no es totalmente diferente, no es totalmente nuevo, no está totalmente desconectado del que murió aquí. En realidad los seres han ido a través de muchas vidas. Ellos tienen acumulación de méritos y deméritos. Cuando un mérito o demérito, o un buen kamma o un mal kamma, obtiene condiciones favorables, éste dará resultados. No sabemos cuándo el kamma dará resultados, pero cuando las circunstancias sean favorables para que el buen kamma dé resultados, llegarán los buenos resultados.
La siguiente vida está condicionada, o digamos, causada por algo bueno o malo que hicimos en el pasado. Porque hay un cierto kamma, hay un resultado de ese kamma. El kamma y el resultado son en realidad dos cosas diferentes, pero están conectados como causa y efecto.
Generalmente le pregunto a la gente: "¿Es usted la misma persona que hace diez años?" ¿Cuál es la respuesta? ¿Sí o no? Ambas, sí y no. ¿No es así? De la misma forma, ¿una persona que renace allí es totalmente diferente o algo pasa desde esta vida a la siguiente? Ustedes tendrán que decir "sí y no", porque el que renace allí no está totalmente desconectado del que muere aquí. Sin embargo, nada de esta vida pasa a la otra vida. Nada se transfiere a la otra vida. Es debido a cierta causa aquí que surgen los resultados allí. De esta forma, el buddhismo no acepta un alma permanente o eterna.
El buddhismo acepta el renacimiento. Tengo algo de miedo de usar la palabra reencarnación. En realidad renacimiento y reencarnación son lo mismo. No podemos evitar usar estas palabras cuando hablamos de eso. En el sentido último no hay renacimiento. La persona que renace allí, simplemente nace allí, no renace. Si decimos que uno ha renacido o reencarnado, se está sugiriendo que algo va a ese lugar. Pero es una persona diferente. En realidad es debido a que existe una causa aquí que hay un resultado allí.
Al final del capítulo sobre el Origen Condicionado se explica algo. Aceptamos identidad y también la diversidad. Aceptamos ambas. En un sentido, el individuo que muere aquí y el que renace allí son diferentes. En otro sentido, hay algo así como una continuidad. Aceptamos tanto continuidad como la diversidad. Aceptamos ambas. No es un compromiso, pero algo así. Tenemos que aceptar ambas en un sentido o en el otro.
Y alguna cosa más quisiera añadir respecto a este tema de los renacimientos:
1) Cuando el Buda visita a los kalamas, que no creían en otra vida, les dice que aunque no hubiera renacimiento la práctica del Dhamma es beneficiosa en esta misma vida, lo cual cualquiera de nosotros puede confirmar.
2) Hubo maestros como Buddhadasa Bhikkhu y Taisen Deshimaru que consideraron
secundario el tema de los renacimientos.
3) Considero que la práctica del Dhamma juega en contra de cualquier expectiva sobre los renacimientos, en la medida que ancla la mente al presente. Lo dice el Buda cuando pregunta a sus discípulos si todavía seguirán preocupados acerca del futuro o cuando afirma que el verdadero brahmán está desasido y no suspira por nada que haya en este o en otro mundo. Además que el máximo ideal budista, el nibbana, teóricamente supone el fin de los renacimientos. Es decir, renacer no es la meta principal del budismo, aunque posiblemente muchos budistas culturales de Asia en la práctica sólo aspiren a renacer en alguno de los cielos de la cosmología budista.
4) Existe una perspectiva al tema de los renacimientos alternativa y complementaria:
La reencarnación o el renacimiento. El origen dependiente.